
«La situación está escalando de manera directa y clara. Está deliberadamente politizada, las acusaciones no confirmadas suenan y las etiquetas ya están pegadas», comentó Anatoli Glaz, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Bielorrusia. Al mediodía del domingo, una nave de la línea aérea Ryanair que viajaba sobre territorio bielorruso en dirección a Vilna, la capital de Lituania, desde Atenas, aterrizó de emergencia en Minsk por una amenaza de bomba, que luego no se confirmó.
En la revisión se arrestó a un periodista opositor, acusado de extremista, vinculado a los disturbios tras las elecciones de ese país, y bajo orden de búsqueda, un hecho que ha sido motivo de politización.
Información de Granma.