
Una vez concluida la misión de apoyar desde el aire en el control del incendio de la base de supertanqueros de Matanzas, el Ministro de Transporte Eduardo Rodríguez Dávila departió al final de la tarde de este martes con la tripulación de los M-18 que se trasladaron a la provincia yumurina como parte del dispositivo movilizado por el país para enfrentar la contingencia.
En la propia rampa del aeropuerto internacional Juan Gualberto Gómez, en Varadero, donde estuvo basificada la flota espirituana —incluyó un avión AN-2 en función de la logística—, Rodríguez Dávila intercambió con los integrantes del dispositivo aéreo espirituano, momento en que les reconoció la misión de hacer una aplicación de agua para aplacar la temperatura en una zona de malezas.
Asimismo, el titular del Transporte entregó al colectivo un reconocimiento por el cumplimiento de la misión y la permanente disposición mostrada para sumarse al combate contra las llamas.

“Fue una ceremonia sencilla, pero emotiva, el Ministro nos hizo un reconocimiento muy sentido, intercambió con nosotros, reconoció el trabajo hecho, la entrega y la disposición que en todo momento tuvo la tripulación para sumarnos a esa batalla que se desplegó en función de agotar todas las vías posibles para sofocar el incendio”, declaró a TransportEspirituano Máximo Mendoza Moreno, jefe de operaciones en la Unidad Empresarial de Base subordinada a la Empresa Nacional de Servicios Aéreos Sancti Spíritus, la única que utiliza en Cuba los M-18 en operaciones de siniestros forestales.
Las propias características que tuvo ese incendio con muchas explosiones — añadió—, no permitía el empleo de los aviones y las naves hicieron una sola descarga de agua, pero estuvieron siempre listas para despegar.
La tripulación se portó guapa en todo momento, son compañeros de mucha experiencia en la activad de sofocar incendios forestales, lo que este era muy diferente, subrayó Mendoza Moreno.