
En las últimas semanas y con no pocas dificultades, se ha venido desarrollando en todo el país la revisión técnica de los vehículos armados por partes y piezas, inscriptos en el censo que terminó el pasado 22 de agosto, como parte del proceso para su legalización para que puedan contribuir a la movilidad de las familias en momentos en que la transportación pública de pasajeros en el país dista de satisfacer las necesidades.
El censo concluyó con un total de 104 565 solicitudes, las provincias con mayores solicitudes fueron Pinar del Río (9 mil 699), Artemisa (9 mil 801), La Habana (9 mil 401), Matanzas (10 mil 538), Camagüey (10 mil 607) y Holguín (10 mil 598); y las motos el tipo de vehículo con más inscripciones, con aproximadamente el 62 % del total.
En la actualidad nos encontramos en el proceso de revisión técnica, que han avanzado a una velocidad menor de la planificado y deseado. Una muestra de ello es que las direcciones provinciales de Transporte han citado solamente a 35 mil 670 personas, lo que representa el 34 % del total. Las provincias de Pinar del Río y Camagüey son las únicas que han citado a más del 90 % de las personas que inscribieron un vehículo en el censo.
En las revisiones técnicas se han presentado muchas dificultades: la falta de fluido eléctrico, lo que ha imposibilitado la realización de la revisiones técnicas planificadas; atrasos acumulados en las provincias de Pinar del Rio, Artemisa, Mayabeque, Granma y Guantánamo por los impactos de dos huracanes; la no presentación de los vehículos a la revisión técnica, debido a que no están listos técnicamente; deficiencias en el sistema informático, lo que ha afectado la realización de las citas y el envío de la información al ministerio del Transporte (Mitrans); y propietarios que no han realizado el cambio de dirección.
En las provincias de Artemisa, Matanzas, Villa Clara, Ciego de Ávila y Las Tunas los citados no llegan ni siquiera al 10 % de los censados y el promedio en el país es de apenas la tercera parte.
Una vez que los vehículos aprueben la revisión técnica, paso imprescindible para tener la garantía de que puedan circular con seguridad, esos expedientes pasan a las comisiones provinciales y luego a la nacional; al ser aprobados, se inscriben en el registro de vehículos, y reciben la chapa y documentación legal correspondiente.
El propósito del ministerio del Transporte y del resto de los organismos e instituciones participantes en este proceso, es el de agilizarlo lo máximo posible. Para ello cada provincia debe establecer una estrategia que posibilite materializar esa voluntad, aún en las complejas circunstancias en que vive el país.
Fuente: Con información del perfil de Facebook de Eduardo Rodríguez Dávila