
Ciertamente los números muchas veces suelen ser engañosos, y prueba de ello es que si bien hasta finales de noviembre último se habían transportado en el país casi 935 millones de pasajeros por todos los medios y servicios; la cifra, aunque representa un crecimiento con respecto a igual período del año anterior, dista mucho, muchísimo, de un nivel satisfactorio.
Claro, esencialmente los incumplimientos e insatisfacciones tienen causas principales en la compleja situación con la disponibilidad técnica de los medios, carencia de combustible y en otras razones también vinculadas al férreo acoso que sufre la economía cubana.
Las mayores dificultades están centradas en la no adquisición de partes, piezas y agregados ―con el lógico y excesivo deterioro de los medios que se encuentran en explotación― así como en el déficit de lubricantes y líquidos especiales, que atentan y dificultan la realización de los mantenimientos técnicos.
Con mirada crítica, la dirección sindical de los trabajadores del transporte analizará el funcionamiento de sus estructuras y los entresijos de asuntos con impacto directo en las empresas que operan con precios centralizados y económicamente se ven afectadas al no poder cubrir sus gastos, dados sus bajos niveles de actividad.
Entre los temas de análisis estarán además la necesidad de herramientas y medios de protección individuales, las mermas en la alimentación de los tripulantes de trenes, así como el incremento de tarifas de muchos organismos por servicios de hospedaje y alimentación para choferes y tripulantes.
Los sindicalistas, reunidos en del Centro de Convenciones Lázaro Peña sesionarán 24 y 25 del presente mes, examinarán la necesidad de que los cuadros en cada nivel de dirección presten la máxima atención a los acuerdos y planteamientos derivados del proceso de información y presentación del plan de la economía, y que promuevan y controlen las propuestas de los trabajadores para eliminar las trabas que entorpecen la producción de bienes, servicios y una mayor eficiencia económica.
Asimismo se pronunciarán por propiciar entre dirigentes sindicales y administrativos el análisis y seguimiento de las medidas aprobadas para dotar de mayor autonomía al sistema empresarial, con énfasis, en los indicadores físicos de la producción, las ventas, las utilidades y sus destinos, los aportes al presupuesto del Estado, el empleo, el salario, y el financiamientos para mejorar las condiciones de trabajo, la ciencia y la innovación, entre otros.
Los asistentes elegirán también la dirección que guiará la labor del Sindicato Nacional de Trabajadores del Transporte y Puertos en los próximos años.
Fuente: Con información de Trabajadores