Exponen al Parlamento resultados del ejercicio de alta fiscalización al Ministerio del Transporte

En el marco del quinto periodo de sesiones ordinarias de la Asamblea Nacional del Poder Popular se presentó el informe sobre ese ejercicio

En el marco del quinto período de sesiones ordinarias de la Asamblea Nacional del Poder Popular, en el Palacio de Convenciones, se presentaron este jueves los resultados del ejercicio de alta fiscalización al Ministerio de Transporte.

La diputada Tamara Valido Benítez, presidenta de la Comisión de Atención a los Servicios, explicó que este organismo tiene la misión de proponer, dirigir y controlar, una vez aprobada, la política del Estado y el Gobierno en materia de transporte terrestre, marítimo, fluvial, lacustre y aéreo.

Esa responsabilidad −dijo− incluye la infraestructura, los servicios auxiliares y conexos, con el objetivo de satisfacer las necesidades de interés público.

Hoy, el sistema empresarial atendido por el Ministerio de Transporte está conformado por cuatro organizaciones superiores de dirección empresarial (OSDE):

Corporación de la Aviación Civil S.A. (Cacsa)
Grupo Empresarial Marítimo Portuario (Gemar)
Unión de Ferrocarriles de Cuba (UFC)
Grupo Empresarial Automotor (GEA)
Ese sistema cuenta con una plantilla de 52 826 trabajadores, con una cobertura actual de un 89.6%.

Durante 2024, concluyó el proceso de conformación de las Direcciones Provinciales y Departamentos Municipales del Transporte, como parte de los órganos de gobierno territoriales. Esa reorganización permite separar las funciones empresariales y estatales y designar, mediante resolución, a los directores provinciales como delegados del ministerio en cada territorio.

Entre los resultados de la fiscalización, se subraya la necesidad de continuar fortaleciendo la preparación de la fuerza laboral y completar las estructuras locales desde el propio ministerio.

Valido Benítez señaló que el recrudecimiento del bloqueo, la crisis económica global y las dificultades propias del sector han afectado negativamente la actividad. Entre los principales desafíos están la baja disponibilidad de cargas, deficientes condiciones técnicas de los medios de transporte, déficit de combustible y falta de financiamiento en divisas para adquirir piezas y agregados.

En ese sentido, el Mitrans se ha trazado como objetivos estratégicos garantizar la autosostenibilidad del sector mediante soluciones propias, detener el decrecimiento de los principales indicadores económicos y avanzar a pesar de las dificultades externas e internas.

La diputada resaltó que, al cierre de 2024, las cuatro OSDE del sector reportaron ingresos totales por 33 000 millones de pesos y utilidades superiores a los 8 000 millones, con niveles de cumplimiento de 94% y 122%. Sin embargo, la Unión de Ferrocarriles de Cuba solo alcanzó un 88% de cumplimiento en ingresos y no logró las utilidades proyectadas, con pérdidas en seis de sus 11 empresas debido a tarifas que no cubren sus costos.

En Gemar, tres empresas cerraron con pérdidas, afectadas por el bajo nivel de actividad portuaria y tarifas insuficientes. Aunque Cacsa mostró resultados positivos, la Aerolínea Cubana de Aviación continúa operando con pérdidas, utilizando aeronaves arrendadas para apoyar el turismo y otras prioridades nacionales.
legalización y compra de vehículos, contribuyendo a la modernización del parque automotor en el país.

Como resultado de las visitas parlamentarias a los distintos territorios, se identificaron elementos negativos. Entre ellos están:

El sector enfrenta limitaciones estructurales que afectan su sostenibilidad, entre ellas la escasez de piezas de repuesto, neumáticos, baterías, combustible y lubricantes. Esas carencias afectan la capacidad operativa de los servicios. Se observan fallas en la planificación, el control, el uso de herramientas digitales y los procesos de contratación y fiscalización, lo que limita la eficiencia administrativa.
Varias provincias carecen de sistemas GPS, software de gestión de flotas y herramientas digitales de planificación, lo que dificulta el monitoreo y la optimización de los recursos.
La población manifiesta insatisfacción por la calidad, frecuencia y cobertura de los servicios de transporte, especialmente en las rutas interprovinciales y rurales. También se reporta el no funcionamiento de un número significativo de rutas de ómnibus urbanos.
El descontrol en la aplicación de precios concertados con transportistas privados y la insuficiente formación de esos operadores generan distorsiones en el servicio. En el transporte marítimo se incumplen los planes de reparación y varada de embarcaciones por falta de recursos materiales y financieros, con un coeficiente de disponibilidad técnica inferior al 50%. En el transporte de carga y pasajeros, la baja disponibilidad técnica de los medios provoca incumplimientos en los planes establecidos.
El coeficiente de disponibilidad técnica de los equipos portuarios es de apenas 48%, a pesar de algunas acciones de reparación y adquisición de montacargas. El completamiento de la fuerza laboral en la actividad marítima está en un 69%, con déficit de personal altamente especializado, como los prácticos. Se requiere priorizar la formación de fuerza laboral en los sectores marítimo y ferroviario, vinculando a los jóvenes a proyectos de investigación que aporten a la formación doctoral.
Tres empresas de servicios portuarios cerraron el año con pérdidas, debido a la disminución del nivel de actividad, el menor arribo de buques, el alza de precios de productos alimenticios y problemas organizativos. Aunque esta situación fue revertida en el primer trimestre de 2025, evidencia vulnerabilidades en la gestión. También se reporta el deterioro progresivo de la red vial, lo que afecta la movilidad y seguridad.
La actividad delictiva en el sector persiste, aunque se logró una reducción del 50% en comparación con el año anterior. Las causas y condiciones que favorecen estos hechos aún no han sido erradicadas.
En Cubana de Aviación, el estado salarial y político de pilotos, ingenieros y trabajadores es preocupante, al igual que el deterioro de la flota, lo que compromete la soberanía operativa. La reparación del hangar de esta empresa aún no ha sido completada.
Finalmente −comentó la presidenta de la Comisión de Atención a los Servicios−, hay potencialidades sin explotar en materia de transformación digital.

“Aunque el Ministerio de Economía y Planificación ha aprobado los esquemas de financiamiento en divisas, es imprescindible su implementación práctica para garantizar los recursos necesarios que permitan ejecutar acciones de mantenimiento, compras e inversiones vitales para la sostenibilidad del transporte”, señaló.
Sandra Santamaría Vázquez, diputada por Marianao, reconoció el esfuerzo de los ferroviarios y exhortó a tomar acciones concretas para que todos los transportistas ofrezcan al pueblo un servicio de calidad.

Sonia Adelaida Chacón Fernández, diputada por Gibara, habló de la preocupación respecto a la limitación del combustible que afecta los servicios de transporte.

“Ante esta situación, no se puede prestar en su totalidad el servicio de transporte de los municipios a las provincias y los transportistas privados asumen ese servicio. Urge hacer una ficha de costo, teniendo en cuenta la compra de los combustibles en divisas”, opinó.

En esta misma línea, Yaquelín Wanton Speck, diputada por Santiago de Cuba, dijo que, aunque se percibe el compromiso del sector en la búsqueda de alternativas en el actual contexto, hay que dar seguimiento al enfrentamiento a las violaciones de precios de los transportistas privados, que varían y no se corresponden con lo aprobado.

“Eso trae alta insatisfacción en el pueblo”, recordó. “Es necesario elevar el control riguroso y sistemático del cumplimiento de los precios concertados en este servicio tan vital para la sociedad. Hay que perfeccionar el vínculo con el Mined y las universidades para preparar a la fuerza calificada, principalmente en el sector marítimo”.
Marta Ayala, diputada por el municipio espirituano de Yaguajay, consideró importante lograr contar a nivel municipal con indicadores que permitan conocer el volumen de movilidad que se vincula a los trámites de la población y de qué manera se puede incidir en esos requerimientos de transportación con gestiones y trámites en línea.

Susel Dominguez, diputada por Bayamo, reconoció la labor comunicativa del ministro de Transporte, Eduardo Rodríguez, y el liderazgo en la información oportuna. “Este liderazgo está sustentado en su vínculo con el pueblo y refleja un estilo de dirección coherente”, dijo.

Comentó que el transporte es un sector sensible, porque en él incide la escasez de combustible y en ese contexto “esta comunicación aporta una retroalimentación necesaria”.

“Este ejemplo del ministro debe ser la regla y no la excepción. Es una comunicación directa y eficaz, que llega a la base”, subrayó.

Ministro de Transporte aborda situación y perspectivas en el sector
Al intervenir en la sesión parlamentaria, el ministro de Transporte, Eduardo Rodríguez Dávila, comenzó destacando la importancia de la fiscalización realizada por el Legislativo.

Rodríguez Dávila reconoció las dificultades del sector. “Al cierre del 2024, como tendencia en años anteriores y en lo que va del 2025, los resultados no se corresponden con las necesidades ni alcanzan los niveles proyectados en el Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social hasta el 2030, lo que genera insatisfacción en nuestro pueblo”, dijo.

Sobre el informe presentado, consideró que refleja de manera precisa y abarcadora las complejidades que enfrenta el transporte en Cuba, “nuestros avances, aciertos y desaciertos como rectores de la actividad”.

Tras señalar que los últimos años han estado marcados por la escasez de recursos, la disminución de servicios y los efectos adversos en las infraestructuras, dijo que “también hemos enfrentado serios problemas organizativos y de calidad en los servicios, los cuales deben ser transformados”.

El ministro enfatizó el compromiso del sector. “Ante estos desafíos, hemos trabajado en la búsqueda constante de alternativas, el desarrollo de propuestas innovadoras y la creación de condiciones para recuperarnos, a pesar de las difíciles circunstancias económicas que atraviesa el país”.

Añadió que “el proceso, claro está, será gradual, atendiendo prioridades, multiplicando las mejores experiencias y aprovechando al máximo lo que vamos generando”.

Subrayó la dualidad del sistema de transporte. “Para nosotros, el sector es como una gran familia, pero también como una gran empresa. Una empresa que debe generar sus ingresos, controlar sus gastos y emplear parte de las utilidades para desarrollarse y contribuir con el país”.

Una empresa −agregó− “cuyos trabajadores pueden estar estimulados, capacitados y comprometidos con la misión y la visión, capaces de construir el futuro con sus propios esfuerzos”, en un esfuerzo que se orienta hacia “un objetivo común: la satisfacción de las necesidades del pueblo”.

El ministro aseguró que incorporarán las recomendaciones recibidas. “Tengan la certeza de que esta empresa, como llamé antes al sector, incorporará los objetivos de trabajo, la solución a los señalamientos y las recomendaciones derivadas de este proceso”, incluyendo específicamente “las vinculadas a la recuperación de la flota y la atención en la subasta de la aviación que recién acaba de mencionarse”.

Sobre la sostenibilidad económica, dijo que “siempre hemos tenido claro que debemos continuar avanzando en la autosostenibilidad económica del sector”, estableciendo una relación directa entre “un transporte público de calidad que requiere de una economía de calidad, y viceversa”.
Para lograrlo, enumeró tres ejes estratégicos: eliminar el lastre que constituyen los pésimos resultados en las entidades que todavía nos presentan, mantener e incrementar los ingresos y utilidades en divisas y en moneda nacional, y garantizar un uso racional de los recursos del presupuesto del Estado.

Identificó como principales obstáculos la falta de divisas convertibles que dificultan la adquisición oportuna de recursos básicos; la insuficiente disponibilidad de combustibles, que afecta tanto la operación como el mantenimiento vial, y las limitaciones en la recuperación de la vialidad.

Destacó avances como el “esquema financiero recientemente aprobado, que nos permitirá atender necesidades urgentes” y el “fondo en divisa para el desarrollo del transporte público, que ya nos está permitiendo ampliar nuestras capacidades”.

Sobre la gestión de combustibles, el ministro afirmó que en el sector se trabaja por una mejor organización de los mecanismos para su asignación y consumo, “todo lo cual encierra reservas de mejora y optimización”, añadiendo que “avanzaremos en la transición energética hacia fuentes de nueva energía en la medida en que lo permitan los recursos financieros”.

Rodríguez Dávila enfatizó la necesidad de una gestión integral. “Lo anterior requiere una mejor gestión de nuestro organismo, desde los ejes principales hasta cada trabajador en cualquier función”.

Señaló que “aún cuando el informe presentado es explícito, quisiera referirme brevemente a algunas de las prioridades contenidas entre las recomendaciones”.

A continuación, enumeró acciones concretas como la adquisición de neumáticos, baterías y otros recursos para elevar la disponibilidad técnica, el restablecimiento de rutas interrumpidas y la prioridad en la asignación de combustibles a nivel local.

Entre los programas en marcha destacó el ensamblaje de triciclos y ecomóviles eléctricos con sus estaciones de carga, la adquisición de microbuses para servicios ruteros y la fabricación de ferrovías y restablecimiento de servicios ferroviarios de cercanía.

Igualmente, anunció un proyecto innovador, “un plan de adquisición de ómnibus eléctricos para tráficos urbanos, con estaciones de carga alimentadas por fuentes renovables”, que incluirá “una modalidad de contratación diferente que contempla mantenimiento y reparación”.

En su intervención, Rodríguez Dávila criticó duramente una práctica recurrente. “Debemos acabar con la mala práctica de invertir en medios de transporte y luego no adquirir piezas de repuesto”, lo que provoca “paralizaciones frecuentes y prolongadas de numerosos vehículos estatales”.
Como complemento, informó sobre un proyecto de ensamblaje de ciclos y ciclomotores con participación de la industria nacional, la evaluación y perfeccionamiento de la política para la comercialización de vehículos, y la necesidad de acelerar el proceso de registro de vehículos armados que circulan sin chapas.

“Otra insatisfacción latente de nuestro pueblo son los servicios interprovinciales estatales”, dijo, comprometiéndose a abordar este sensible tema.

Sobre los problemas de venta de pasajes, el ministro comentó que la baja oferta hace que la compra de pasajes mediante la aplicación Viajando genere insatisfacción, denunciando que “el déficit de capacidades es aprovechado por personas inescrupulosas para lucrar con la necesidad del pueblo”.

Ante esto, advirtió que será un “asunto sobre el que reforzaremos el enfrentamiento”, anunciando planes para “incrementar y perfeccionar la oferta estatal de transporte” y organizar mejor la oferta no estatal.

En materia de infraestructura, Rodríguez Dávila señaló que “avanzar en la contratación y adquisición de recursos para elevar la disponibilidad técnica de los ómnibus, coches, locomotoras, embarcaciones y aviones de Cubana de Aviación es una prioridad’.

Detalló los esfuerzos para mejorar el tren especial, restablecer servicios interprovinciales como Santa Clara-Nuevitas, Cienfuegos-La Habana y Sancti Spíritus-La Habana, así como recuperar y mejorar el estado de las vías férreas.

Con especial énfasis en los trenes nacionales, reconoció que “un asunto de especial atención es el restablecimiento de la calidad del servicio”, refiriéndose específicamente a “la puntualidad, el confort, las ofertas a bordo y la atención en estaciones”.

Aunque señaló que estos servicios “se han deteriorado con el tiempo y las dificultades”, valoró “la esmerada labor de tripulaciones y ferroviarios”.

Anunció acciones para la modernización del transporte marítimo, además de la adquisición de un catamarán adicional para la ruta Batabanó-Isla de la Juventud, y la reparación de los catamaranes Río Júcaro, Río Máximo y Fuerte y Perseverancia.

En aviación, destacó dos objetivos paralelos: “Avanzaremos en el incremento de la conectividad aérea tanto nacional como internacional”, mientras se “modernizan los aeropuertos para mejorar la calidad de los servicios”.

Sobre el crítico estado de las carreteras, dijo que se trabaja para “recuperar la vialidad es un tremendo reto ante el marcado deterioro de los últimos años”. Explicó que esto requiere garantizar recursos financieros en divisas y moneda nacional, completar el equipamiento necesario y mejorar la coordinación de los aseguramientos.

En logística, el ministro informó sobre el restablecimiento gradual de la flota mercante y auxiliar, la priorización del cabotaje, especialmente en puertos como Nicaro y Carúpano, la reactivación del transporte de carga por ferrocarril portuario con mayor uso de contenedores y el restablecimiento del servicio exprés como parte de los planes futuros.

También destacó avances en “la paquetería internacional, tanto por vía aérea como marítima”, señalando que “impulsaremos la recuperación de la disponibilidad técnica de los vehículos en bases municipales y la incorporación gradual de pequeños vehículos eléctricos con sus respectivas estaciones”.

Rodríguez Dávila se refirió a los niveles de accidentabilidad, “un flagelo que cada año cobra más de 600 vidas”.

Mencionó acciones conjuntas con el Ministerio del Interior para “prevención y enfrentamiento a conductas riesgosas”, extendiendo estos esfuerzos a la seguridad ferroviaria tras “serios incidentes recientes”.

“A nivel de ciencia, innovación y transformación digital, las reservas que tenemos son enormes”, dijo en otro momento.

Sobre comunicación social, mencionó el proyecto Desafío como resultado de “un trabajo de intervención con nuestro pueblo”.

“Preferimos concentrarnos en soluciones más que en protestas”, dijo, criticando “la formalidad, justificación e insensibilidad como enemigos de la satisfacción poblacional”.